Samsung Electronics Co Ltd está en la perspectiva de sufrir un bombazo en su ganancia operativa de unos 3.000 millones de dólares en los próximos dos trimestres inmediatamente de que dejó de promover su teléfono inteligente defectuoso Galaxy Note 7.
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El informe lleva a unos 5.300 millones de dólares las pérdidas totales que la firma presiente como resultado de los inconvenientes de sobrecalentamiento del aparato, al punto de que anunció que tolerará un impacto de 2.300 millones de dólares en sus beneficios del tercer trimestre.
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El dispositivo premium con en que la firma surcoreana proyectaba rivalizar contra los últimos iPhones de Apple Inc debió ser interrumpido, menos de dos meses después de su expulsión, debido a los desconfianzas de seguridad.
El gigante de la tecnología expresó en un comunicado que tiene esperanza, el impacto del retraimiento sobre sus ganancias se sitúe en el rango medio de tres billones de wones en los próximos dos trimestres.
Las operaciones de Samsung, que se han desplomado un 8%, subían un 0,6% a las 0228 GMT, frente a una ganancia de un 0,5% en el mercado más extenso. Para indemnizar la pérdida de ingresos, Samsung indicó que extenderá las ventas de dispositivos móviles como el Galaxy S7 y el S7, y ejecutará «cambios significativos» en sus procesos para certificar la calidad a fin de optimar la seguridad de sus productos.
Inversionistas y analistas expresaron que no obstante la compañía se sacudió rápido para apaciguar al mercado acerca de los posibles costos financieros, unos desgastes más profundos no pueden ser descartados.