Espesa, así fue la niebla que cubrió el 5 de diciembre de 1952 la ciudad de Londres, hecho que no pasó desapercibido por el saldo que dejó en la capital británica.
Publicidad:El frío coló tanto las calles de la capital londinense que obligó a quemar más carbón para mantener los sistemas de calefacción en funcionamiento y los humos procedentes de fábricas, vehículos y hogares se acumularon sobre la ciudad ante la ausencia de viento.
Cuando la niebla se disipó el 9 de diciembre, la cifra de fallecidos era de al menos 4 mil muertos y más de 150 mil personas fueron hospitalizadas. Ante esto, estudios determinaron que la cifra de víctimas mortales fue de alrededor de 12 mil, entre ellos miles de animales.
Publicidad:En la siguiente galería se puede ver el Londres de 1952.