Existen muchos mitos sobre tu cabello que pasan de generación en generación que muchas veces son falsos y no la sabemos y terminamos haciendo mucho daño a nuestro cabello.
Publicidad:Estos son los 10 Mitos sobre el cuidado del cabello que no deberías creer
El pelo crece de las raíces, nunca de las puntas, por lo tanto el hecho de cortarlas no influirá en la rapidez con la que crezca. Sin embargo, al cortarlas, se verán más sanas y el cabello más bonito.
Publicidad:Si tienes el pelo corto, probablemente no necesites secador, sin embargo, si tienes mucha cantidad o lo tienes muy largo, es importante que lo seques bien para que la humedad no penetre en las fibras capilares. Si dejas el pelo mojado durante mucho tiempo, se volverá más frágil y quebradizo.
Esto es falso. De hecho, no es bueno cambiar de champú con frecuencia puesto que altera el pH del cuero cabelludo.
Es completamente al contrario. La caspa suele aparecer cuando el cuero cabelludo es graso.
Utilizar aceites y productos que regeneren las fibras capilares puede servirte puntualmente para hidratar el cabello, pero las puntas seguirán estando dañadas hasta que las cortes.
Lo único que conseguirás al hacerlo es eliminar sus aceites esenciales y debilitarlo. Péinate el cabello únicamente cuando te resulte necesario.
El grosor del cabello viene dado por la genética, por lo tanto no podrás alterarlo de ninguna manera.
Dado que la cantidad de cabello que tiene una persona no depende del cuidado, es imposible que si te arrancas un pelo te crezcan 3. Sin embargo, es mejor que no lo hagas puesto que puedes dañar el folículo piloso.
El cabello está formado por tejido muerto, ni el agua fría ni la caliente pueden afectar al estado de la cutícula.
La cantidad de champú puede variar con la longitud y la densidad del cabello. Por lo general, es suficiente una cucharada, pero ten en cuenta que demasiada espuma puede resecar el cuero cabelludo.
Tendrás un cabello más saludable si te dedicas mas a él en cuanto a mascarillas naturales que le apliques y no creyendo en estos mitos que se han demostrado que son completamente falsos.