La vitamina K es liposoluble. También se denomina antihemorrágica.
Como vitamina K existen varias moléculas que tienen en común su participación en procesos de coagulación. De ahí su nombre, por la palabra alemana Koagulation.
Los anticoagulantes y los antibióticos interfieren con la vitamina K.
Una proporción importante de vitamina K es sintetizada a nivel endógeno en el intestino humano.
La toxicidad de este componente es bastante rara.